Todo lo que conocias, esta a punto de cambiarestas lista para eso?

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martes, 13 de septiembre de 2011

Me mude: Nuevo espacio

Bueno, a los todavía fieles seguidores que me queden, mis más y avergonzadas disculpas por tener abandonado este blog completamente, pero la cuestión es que, aunque me cueste admitirlo, me he quedado estancada con esta historia, y poco a poco le he ido perdiendo el interés. Lo se, es imperdonable.


Actualmente tengo un millón y medio de ideas para trabajar, algunas de las cuales me entusiasman mucho, pero por ahora me he estado dedicando a cuentos cortos. Es por eso que los invito a ver mi nuevo blog:


http://littlewarmbreath.blogspot.com/


En el no va a publicarse una sola historia, como ocurría en este, sino que va a ser para pequeños cuentos, pensamientos, frases, canciones, recomendaciones de libros, lo que se les ocurra.


Así que si lo quieren, visitenlo y pues, verán como es.


De nuevo, mil disculpas, espero en un futuro cercano volver a continuar con esta historia.



lunes, 30 de mayo de 2011

SI, PARA SU INFORMACION, ESTOY VIVA AUN

Bueno, no se que decir, porque me faltan palabras para decir lo apenada que estoy y lo mucho que lamento el tiempazo laaargo en el cual estuve "ausente". la vuelta a clases me pegó duro y costó un poco ponerse al tono (aunque humildemente lo he ido llevando muy bien :D), pero en fin, quisiera ofrecerles mis mas sinceras disculpas por haberme pedido tantas cosas y por haber estado tambien ausente en el MSN tanto tiempo.


Y para compensarlos (si es que se puede), les traigo un cuentito cortito que escribí hace unos días en una oleada de inspiración. se lo dedico a mi madre, que hoy cumple años y a la que adoro con mi alma.


Aquí les va:



EL MAESTRO PINTOR
Fría era la tarde, cuando se sentó, en su sillón favorito, el más mullido de toda la biblioteca, a tomar calor junto a la gran estufa a leña. Había pasado todo el día haciendo recados por la ciudad, y ahora, sus dedos entumecidos, buscaban en vano el calor del fuego, tratando de volver a hacer circular la sangre.
Acomodándose la bata roja que le cubría los hombros, el anciano hombre recogió distraídamente de la mesa ratona a su derecha, un pesado y desgastado álbum negro. A pesar de sus años, el libro parecía cuidado, como si su propietario tuviera especial cuidado en limpiarlo y sacarle el polvo todos los días.
Lo abrió torpemente, con una fuerza que hizo que una de las fotos amarillentas se desprendiera del papel y cayera al suelo. El hombre suspiró cansinamente y, apoyándose en uno de los apoyabrazos del sillón, la recogió, observándola atentamente por unos instantes.
En ella, cuatro muchachos de cabellos muy negros posaban junto una atractiva mujer de mediana edad. De fondo, una enorme casona de gruesas paredes crema y techo de tejas rojas, se alzaba imponente, casi como una fortaleza.
El anciano sonrió.
¡Cuanto había cambiado esa casa desde ese momento! Cuanto había cambiado él mismo en ese momento.

Y es que el Mundo entero estaba cambiando.
Una nueva oleada de cultura e ideologías se había expandido por todo el viejo continente, viajando incluso más rápido que los herrumientos ferrocarriles de la campiña. Y Paris, como capital bohemia de las artes y la expresividad, no había sido la excepción.
Cientos de inmigrantes y campesinos de boina y chaleco habían emigrado a la seductora ciudad del amor, buscando aquella llama de inspiración que venia escapándoseles desde sus remotos pueblos de origen. Tanto es así, que, en menos de dos años, las pensiones se habían llenado de inquilinos, de nacionalidades e idiomas diversos, que buscaban aquel sentimiento de libertad del que tanto se sentían privados.
Poetas enamorados, dramaturgos estrafalarios; y sobre todo, pintores.
Y ante semejante oleada de inmigrantes, los viejos vecinos  de Paris habían encontrado, así como por casualidad, un muy verosímil negocio, del que se había hecho tradición formar parte. Las viejas y amplias casonas, especialmente aquellas ubicadas en los barrios “revolucionarios” del corazón de Paris, abrían ahora sus puertas a los pintores y escritores famélicos, quienes apenas podían pagar media cama en  una verdadera pensión. 
“L’ blue Canard” era sin ninguna duda, una de los más populares residencias de esta categoría.
Dos pisos de crujiente madera y Altas paredes blancas servían de cobijo para los autoproclamados “Hijos de la Revolución”, quienes, como pequeñas avispas, habían invadido con rapidez inaudita el tan exótico y viejo barrio de Monmartré.
Y así, entre brochas y plumas, viejos libros y lienzos frescos, habían crecido los cuatro hijos de madame Valois.
Viuda desde hace años, madame Valois se había establecido con sus cuatro hijos pequeños en la vieja casa paternal de su marido, desde que este muriera de tuberculosis cuando estos eran apenas unos niños. Meses transcurridos, su situación económica la había forzado a alquilar las pequeñas piezas sobrantes de la gran casona, ganando con ello una pequeña renta, no muy grande, pero lo suficiente para subsistir.
Poco sabia ella, que su emprendimiento tendría tanto éxito, y que, en menos de dos años, “L’ blue Canard” se había convertido en uno de las pensiones por excelencia, en donde habitaban actualmente unas doce personas.
Entre pintores y poetas, las cuatro criaturas habían desarrollado un sentido de la cultura exquisito, y disfrutaban sentarse todas las tardes en las terrazas, donde los artistas se reunían a aprovechar la tenue luz del crepúsculo como fuente inspiración.
 Sin embargo, en quien más pasión había despertado esa nueva oleada de cultura que se había expandido en Paris era al pequeño Elliot.
El más joven de los hermanos Valois, con solo seis años había desarrollado un interés por el arte, tan profundo, que había llegado incluso a llamar la atención de su propia madre.
Porque el niño amaba pintar.
Era su costumbre acomodarse todas las tardes junto con los pintores, jugueteando con los pomos y, ante cualquier descuido de su dueño, robando los pinceles para realizar una “última pincelada” a sus trabajos, cosas que siempre le ocasionaban más de un problema; principalmente con madame Leroy, quien, además de vieja amiga de su madre, se encargaba de hacer la limpieza del lugar.
Pero más allá de todos los artistas que habitaban su hogar, solo uno, de entre los doce, había logrado cautivar por completo su precoz mente.
Nadie sabía su verdadero nombre, ni recordaba el momento exacto en el que había arribado; pero todos daban por sentado su existencia en la casa. Como una sombra permanente, casi parte del decorado, el viejo maestro pintor solía sentarse bajo la sombra de uno de los raquíticos árboles que adornaban el patiecito, pincel en mano y una mirada vacía que parecía mirar muy por encima de tu hombro.
El hombre era ciego.
Nadie sabia nada de el, más de que rondaba los sesenta y amaba pintar. Corría un rumor, de que antaño, había sido un pintor famoso y reconocido; uno de los tantos artistas perdidos en el olvido, tras la llegada de otros más frescos y nuevos. Ahora, no era más que un viejito pintando a la sombra del verde. Más aun así, sus pinturas parecían cobrar vida con cada pincelazo por parte de su autor, como si en cada gota fuera una parte de su propia vida. Tan maravillosa vista era elogiada y admirada por todos los habitantes y vecinos de Monmartre, elogios que el viejo ciego recibía con un humilde movimiento de cabeza.
¿Es que, como era posible que un pintor, cuya vista representaba para él su principal herramienta, careciera de ella y sin embargo, lograra tal exquisita combinación de realismo y fantasía en una sola pieza?

Y así pasaron los años, el pequeño Elliot creciendo cada día, estudiando cuidadosamente al viejo pintor, siempre de lejos, como si temiera disturbarlo de su casi ceremoniosa tarea de pincelar el lienzo. Soñando con algún día conocer aquella tan preciada técnica de pintura que el maestro insistía en esconder.

Fue así un día, que, al tener Elliot dieciocho años, decidió por fin acercarse al viejecito, la curiosidad no pudiendo aguantar más en su pecho. Pensaba marcharse el mes siguiente, siguiendo su sueño de convertirse en un pintor exitoso y de conocer lugares exóticos; y se negaba rotundamente, a marcharse sin haber antes aprendido los secretos de aquel a quien tanto había admirado en su niñez. Sabia que accedería a ser entrevistado; ya que a pesar de callado, el hombre era muy gentil.
Lo encontró pues, como todas las tardes, empotrado en su vieja silla de madera, a la sombra de su árbol.  Lentamente, con paso rígido y cauteloso, se le aproximó, como si temiera ahuyentarlo si aceleraba el paso.
Le fue observando fijamente los ojos, de aquel azul tan profundo y sereno, que, si no hubiera sido por el semblante vacío que expresaban, hubieran sido muy hermosos.
-Disculpe-murmuró, mientras se paraba frente a él, expectante e impaciente.
Se produjo un corto silencio, profundo como un abismo, antes de que el hombre abriera la boca, sin retirar la vista de la nada que observaba con tanto ahínco.
-En que puedo ayudarte hijo- su voz era áspera y seca, como si hubiera pasado días sin probar gota de agua. Sin embargo, había impreso en ella, un cierto aire de sabiduría.
El muchacho tragó saliva, y, dándose ánimos, arrimó una silla de una mesa cercana y se instaló junto al viejo, cuya silla estaba enfrentada a un gran lienzo. En él, plasmado, casi como una fotografía, un hermoso paisaje primaveral se extendía por la tela, lleno de colores tan vivos que parecía real.
Abrió los ojos Elliot de par en par, impresionado por el trabajo, a la vez que su boca se abría ligeramente; más se apresuró a recobrar la calma y habló nuevamente.
-Es una muy buena pintura- elogió con timidez.
El hombre sonrió, aun mirando hacia el frente.
-¿Si? eso es bueno. No estaba seguro de si había logrado expresar la imagen correctamente.
Desconcertado con esa declaración, el muchacho estaba a punto de manifestar su duda, cuando sus ojos se fijaron en la pintura nuevamente. Inmediatamente, su seño se frunció, como si hubiera encontrado allí algo que no cuadraba.
El hombre pareció notar esto enseguida
-¿Ocurre algo hijo?- preguntó en voz alta, más su vista seguía clavada en el horizonte.
Elliot vaciló un instante
-Bueno- comenzó titubeando- es que…se trata de las flores que usted ha pintado, los tulipanes a un costado del lago.
En efecto, a unos pasos del agua casi turquesa, el hombre había pincelado unos delicados tulipanes azules, inclinados ligeramente hacia la derecha, como si el propio viento lo estuviera meciendo.
-¿Las flores? ¿Qué ocurre con ellas?
-Pues verá-otro titubeo- he visto muchos tulipanes en mi vida, muchos de ellos rosas, aunque casi todos rojos. Pero…nunca había visto un tulipán azul. Es más, por lo que he leído, no creo que existan.
Silencio.
Aguantó levemente la respiración mientras esperaba la respuesta del otro, temiendo que el viejo maestro pudiera enfadarse ante tal impertinencia.
Sin embargo y para su sorpresa; la cabeza del viejo giró lentamente, hasta que sus ojos azules se encontraron con los suyos. Fruncido el seño levemente, el hombre depositó el pincel a un costado y por primera vez, sus ojos parecieron mirarlo de lleno.
-¿Y quién te ha dicho a ti que no existen?- preguntó severo, más no enfadado.
-Pues, yo nunca he visto….
-Que nunca lo hayas visto- interrumpió tranquilamente- no significa que no sea real. Solamente significa que has estado tan ciego que no lo has visto antes. Hasta ahora.
El muchacho fue a replicar, más  no tuvo tiempo; ya que el anciano continuó.
-Todo lo que necesito es que existan- y con esto, señaló con su dedo índice la parte superior de su cabeza- aquí.
Una nueva ola de desconcierto le invadió, y con un murmullo lleno de curiosidad, dijo
-Disculpe, pero no le entiendo.
El anciano esbozó una juvenil sonrisa.
-Supongo que crees que solo soy un viejo ciego y loco que no sabe de lo que habla ¿me he pasado mucho tiempo sin ver, y ahora, no recuerdo ni los colores de las flores?
-¡No!-saltó- ¡Yo nunca me atrevería a insinuar…!
-Escucha hijo- colocó una arrugada mano sobre el hombro del chico. Para su sorpresa, la mano estaba tibia- una de las cosas más importantes que un pintor debe aprender en su vida, es que; no importa que sus ojos no puedan decirle qué debe pintar o cómo, ya que siempre tendrá una herramienta mucho más valiosa que esa
-¿y cual es esa?- Elliot ladeó la cabeza.
-Su imaginación- susurró el viejo con aire místico, mientras volvía a tocarse las sienes.- Hijo, en mi mente, puedo imaginar lo que sea. Todo este paisaje que tú vez, lo he creado yo, a mi antojo.
Elliot asintió
-Los artistas de hoy en día viven presos, obsesionados con lo que ven. O mejor dicho de lo que creen ver. ¡Al diablo con eso! la vista puede ser el más engañoso de los sentidos. Es el hecho de haberlo creado con tu propia imaginación lo que lo hace tan hermoso. Y si en mi mente los tulipanes son azules, pues que así sea.
-Entonces- Elliot se aventuró a hablar, inseguro- esta pintura es… ¿perceptiva?
Su sonrisa se ensanchó.
-Podrías llamarlo así. Yo prefiero decir que pinto lo que siento.
-Pero ¿por qué? ¿Por qué seguir pintando cuando usted- tragó saliva el muchacho, seguro de que esta vez sí lo irritaría su indiscreción- no puede ver qué es lo que pinta? No puede apreciarlo, ni podrá nunca.
Se giró nuevamente la cabeza del viejo para enfrentarse a la suya, sus ojos, dos orbes vacíos, clavados en quién sabe donde. Sin embargo, había  seguridad y paz, mucha paz, reflejada en ellas.
-Porque-su voz retumbó en su cerebro, y esas palabras, dichas aquella tarde, se grabarían a fuego en su memoria hasta el fin de los tiempos- la pintura, es algo que solo puedes ver desde tu interior. La pintura, hijo, es la ventana del alma.

Levantose del mullido sillón de cuero, y, agarrando cuidadosamente su largo bastón de madera, dejó la descolorida foto en la mesa ratona y salió de la habitación. Atravesó el frío pasillo hasta una de las puertas del fondo. Sus dedos temblorosos hicieron girar la gran llave dorada que mantenía colgada en su pecho y, con un chasquido sordo, la puerta se abrió.
El inmediato olor a polvo y óleo invadió sus fosas nasales, una oleada de viejos recuerdos que volvían hacia el. De pronto, se sintió cuarenta años más joven.
Avanzó por entre los trastos, cuidando no tropezar con los tantos artefactos apilados desordenadamente, hasta que por fin dio con lo que buscaba. Tomó la pesada tela sucia que lo cubría y, con un firme tirón, la corrió, dejando al descubierto el polvoriento lienzo que permanecía debajo. Los colores todavía se sentían vivos y calidos; y las flores, junto al lago, aun parecían ser mecidas por el viento.
Aquellos tulipanes azules…
El anciano sonrió, y, tomando uno de los pinceles apilados en una desgastada mesa de madera, se sentó en un taburete apolillado. La luz se colaba tenuemente por las cortinas, dándole un halo místico a la habitación.
Y así, el hombre cerró los ojos, y dejó que se abriera, una vez más, la ventana de su alma.

FELIZ CUMPLE MAMÁ HERMOSA, TE AMO SOS TODO 
De nuevo, disculpen la tardanza :), se los quiere

lunes, 21 de marzo de 2011

PREMIO Ö


Hola a todos!
Tiempo sin vernos no? haha es que he estado superrecontrahiperduper ocupada (?) xD
pero aqui me tomo un segundito para publicar un premio :)


MUCHAS GRACIAS A White_Demon POR ESTE HERMOSO PREMIO^^


Se lo quiero dar a:
Rosebelle: Porque sus dos historias son INCREIBLES y adoro todos sus personajes. Sobre todo Eliseos xD
Mary Ann:  Por su blog My Crazy Only world, donde habla sobre muchos temas variados y publica pensamientos y cuentos extraordinarios :). Tambien por su novela Vanidad, que aunque no este actualmente publicando, me encanta y siempre me encantara.


y por ultimo, pero no menos importante:


Ariadna: A pesar de estar DESAPARECIDA de la faz de la Tierra xD, su novela fue de las primeras que lei, y aun cuando hace AÑOS que no publica, la sigo adorando :D


Saben algo?
Últimamente se me ocurrio una idea para una nueva novela, diferente a esta que estoy escribiendo; y he estado pensándola y puliéndola bastante entre ayer y hoy. es solo una idea chiquita que se me vino a la cabeza, pero ya comencé a tener idea incluso de los personajes.
asi que quien sabe, quiza la pueda perfeccionar del todo y ver que pasa :D


Bueno, me despido


Au Revoir!

domingo, 13 de marzo de 2011

Comedy Time?

Bueno, se estarán preguntando por qué estoy publicando este post  que no tiene ABSOLUTAMENTE NADA que ver con mi historia ni este blog.


Bueno, aquí les va la explicacion. Yo, ademas de escribir, soy una gran fanatica de la comedia. Ustedes saben, Friends, Two and a Half Men, TBBT (The Big Bang Theory), etc.


Y hace cosa de unos meses, estaba navegando muy tranquilamente por Internet, cuando se me cruza un video que decía Yu Gi Oh! las series resumidas. (Abridged series originalmente)
Yu Gi Oh? pensé yo. Mh, eso me suena familiar. Entonces recordé que cuando era un infante (?) yo solía mirar un cartoon con ese nombre, que trataba de adolescentes con mucho tiempo libre que jugaban a las cartas (?)
Quien podria seguir tan interesado en un show que terminó hace años?
Entonces, leí en la descripcion que decia; traduccion de la exitosa parodia: YGO the abridged series. Me llamó la atención, y decidí echarle un vistazo, esperando encontrar algo gracioso. Los comentarios en el video me ayudaron a tener paciencia y esperar a que cargara por completo.


Cuanto me alegro de haberlo hecho; porque, señoras y señores, resultó ser LA MEJOR PARODIA que he visto en mucho tiempo. Aun si no has oido de YGO (Cosa que dudo, porque fue SUPERHIPERMEGA popular en su tiempo) aseguro que van a tener un rato de risa asegurada.


Luego de ver el capitulo quede "enganchada" y decidí averiguar mas sobre la susodicha  "serie resumida". Luego de investigar, averigüe que fue creada originalmente por un hombre Britanico bajo el nombre de LittleKuriboh, y que ya es famosa en muchas partes del mundo.


Aquí les dejo el primer capitulo subtitulado. Si no quieren no lo miren, pero les aseguro que vale la pena.


siendo eso todo, me despido. Lamento haberlos echo perder el tiempo con mi extraña sugerencia ;)

cuídense mucho internautas!

sábado, 12 de marzo de 2011

Premio :)


Reglas: 
Escoge tus 3 blogs favoritos o tus 3 mejores seguidores y otórgales el premio.
Escribe porque te gustan (:
Escribe 10 cosas sobre ti.
Escribe que te gusta del blog que te lo dio.
Pon su URL en tu web.

Primero que nada MUCHISIMAS GRACIAS a Rosebelle por este premio! Significa mucho para mí: D


Bueno, creo que mis tres blogs ya recibieron el premio, pero de todos modos queria otorgárselos porque son los seguidores más fieles que he conocido! ^^

 Lucy : además de ser una seguidora súper fiel y una gran persona, su historia me encanta. Es sumamente dulce y te vas enganchando mucho con ella!

 white_demon: igualmente, una seguidora y persona de oro ^^. Tiene un gran talento y su historia es sensacional! En serio, tienen que leerla! No voy a dar muchos detalles, para que lo comprueben ustedes mismos ;)

Mary Ann : de oro y plata también xD. Su blog es muy entretenido, además de tener temas super variados y muy interesantes. Se los recomiendo

10 cosas sobre mí…mh, veamos (tengan en cuenta que son las 11:45, por lo tanto los datos pueden ser completamente al azar xD):
  1. ADORO leer, últimamente sobre todo son novelas policíacas ;)
  2. todos los que me conocen me consideran muy realista y muy madura para alguien de mi edad.
  3. cada vez que estoy aburrida, escribo. Aunque sea inventar nuevos personajes, o historias sin terminar, pero no puedo estar sin escribir ;)
  4. Considero que las personas se han vuelto muy superficiales últimamente. Solo conozco pocas (y eso las hace mas apreciadas) personas que realmente se toman el tiempo para mirar a su alrededor más allá de sus “problemas”.
  5. Soy de las personas que necesitan su privacidad, estar a solas a veces.
  6. La música es sumamente importante para mí. no solo es una fuente de inspiración que deja volar mi imaginación sino una compañía.
  7. Me irritan las personas que piensan que saben todo, cuando en realidad necesitan recorrer un largo camino todavía.  He notado que mucha gente joven tiende a pensar esto.
  8. Mi familia es mi pilar de apoyo. A ellos se que puedo confiarles todo :)
  9. Modestia aparte, puedo escribir bastante bien en Ingles
  10. Hace poco terminé de leer La Historiadora. Gran libro, se los recomiendo. Por lo menos es un poco mas tradicional en cuanto a los vampiros que Twilight ;)

Mh, ¿Qué me gusta de La vida en mí?
Todo. Primero que nada, la historia es súper interesante y original; nunca había leído una novela con una trama así.
Los personajes y sus personalidades también están muy bien creados.

De llevándome al cielo? Igual. Y adoro el personaje de Eliseos hehe xD

Aquí esta el blog:

ENTREN!


martes, 8 de marzo de 2011

Capitulo 26

Lo prometido es deuda; aquí esta el capitulo 26. 
Lamento la tardanza!


Capitulo 26

-No tengo idea de que hablas- murmuré fríamente sin siquiera voltearme a verlo.
Estaba equivocado. Todo lo que Jason había dicho no era más que una simple mentira. Hacia mucho tiempo que yo no deseaba…
-Claro que la tienes- contestó, casi tan frío como yo- sabes perfectamente que detrás de esa faceta de niño bueno, se esconde un monstruo. Y ni siquiera tú sabes cuando saldrá a flote de nuevo…
-¡Ya cállate!- le espeté, sintiendo de pronto una incontrolable jaqueca- ¡Tú no sabes nada sobre mi! ¡Yo no soy como tú!
-No, por supuesto que no. Al menos yo admito lo que soy.- murmuró a mis espaldas.
Mi cabeza estaba por explotar. Parecía que con cada pulsación, un montón de agujas se clavaran en mis sienes, provocándome un dolor insoportable.
-Lo ves. Aun inconcientemente, sabes que tengo razón- a pesar de estar de espaldas a él, pude sentir como una sonrisa de triunfo se curvaba en sus labios.
Inspire y traté de hacer el dolor desaparecer.
-¿Por qué estas aquí?- murmuré al cabo de varios intentos fallidos- ¿por qué llegas a esta casa en el momento más inoportuno que podrías? ¿Por qué insistes en torturarme? ¿Por qué?
Me volteé para enfrentarlo. La sonrisa desapareció de sus labios, reemplazada por una mirada llena de rencor.
-Yo solo vine a cumplir con lo que mereces…-sus ojos se tornaron más oscuros
Respiré
-Si alguien debiera pagar por lo que pasó esta noche…ese serias tú- repliqué apretando mis dientes.
-Depende de cómo lo mires- esbozó una imperceptible sonrisa, dejando ver su dentadura afilados- ya te lo dije, solo vengo a cobrar lo que hiciste
-¿Y yo no debería hacerlo?- alcé mi tono de voz, sintiendo como una oleada de rabia me inundaba- ¿Yo no debería vengarme de ti por haber asesinado…?
En ese momento la gran puerta de la biblioteca se abrió y Amethyst irrumpió en ella.
-Erik, ven rápido. La chica despertó…y creo que tiene algo importante que contarnos.

………………………………………………..
Ambos se voltearon instantáneamente hacia mí y me miraron expectantes.
-¿De que hablas?- dijo por fin Erik, frunciendo levemente el seño
Inspiré profundamente y procedí a explicarles.
-Hace unos minutos ella despertó nuevamente, y me dijo su nombre. Luego yo le pregunté como había llegado aquí, y ella me prometió contarlo. Tú dijiste que ella tenia la esencia de los dos chicos que trataron de secuestrarme ayer- fruncí el seño pensativamente- por lo que será mejor que tu también oigas esto.
Me detuve y exhale el aire cansinamente. Había hablado muy rápido.
Ambos quedaron en silencio durante unos segundos, como si procesaran la información que acababa de comunicarles. Finalmente, Erik habló.
-Tienes razón. Vamos para allí.
Se acercó a mí y tomó mi brazo, arrastrándome suavemente hacia afuera de la biblioteca.
Avanzamos por el largo pasillo, Erik aun sujetando mi brazo, mientras éramos seguidos por Jason.
En ese momento mi teléfono comenzó a vibrar en uno de mis bolsillos.
-Lo siento- musité mientras acercaba el aparato a mi oreja- no tardaré, lo prometo.
Erik asintió y siguió de largo junto con su hermano, mientras yo me recostaba contra una de las paredes.
-¿Hola?- dije cuando finalmente hubieron pasado
-¿Amethyst? ¿Eres tú? ¿Se puede saber donde rayos estabas? ¿Y por qué no has aparecido en la casa en todo el día?- una voz frenética exclamó del otro lado de la línea.
Era Gabby. Genial, otro problema más
-Este, yo…estuve toda la mañana en el centro comercial- mentí cruzando los dedos- con Chloe y Liz. Ahora mismo estamos en su casa.- agregué, tratando de mantener un tono calmado y seguro.
Silencio.
-Aha…-dijo Gabby, y yo crucé mis dedos con más fuerza- Esta bien. Pero la próxima vez me avisas desde el principio. Y quiero que estés en casa antes de las diez ¿Está bien?- ordenó tratando de adoptar un tono de voz autoritario
Sonreí en silencio. ¡Sí, todo había salido bien!
-Claro, claro, por supuesto- me apresuré a contestar- no te preocupes.
-De acuerdo. ¿Necesitas algo?- Preguntó suavizando su tono
-No, no, estamos perfectamente bien.- murmuré algo nerviosa-Ahora tengo que irme, nos vemos Gabby.
-Cuídate mucho- contestó ella mientras yo oprimía el botón de colgar.
Solté un bufido.
Era como si de pronto estuviera llevando otra vida secreta. Una vida que obviamente, nunca nadie me creería.

Mientras tanto
Jason y yo pasamos junto a Amethyst y seguimos de largo por el largo pasillo, mientras ella colocaba el celular junto a su oído.
Llegamos finalmente a la habitación en donde se hallaba la chica y Jason colocó una mano sobre el picaporte; más yo la aparté rápidamente con un golpe.
-No. te quedas aquí afuera- expliqué autoritariamente.
El pestañeó un par de veces
-¿Quién murió y te hizo mi jefe?- contestó con una sonrisa burlona, mientras insistía en abrir la puerta.
Mi mano golpeó la suya de nuevo
-No necesito ser tu jefe para decirte que hacer en mi casa- puse énfasis en la penúltima palabra
-Ya. Pero yo como tú hermano mayor, tengo el derecho de hacer lo que se me de la gana. Así que, con permiso- me empujó contra la pared y colocó su mano en el picaporte nuevamente.
-Ya deja de hacer eso- me quejé irritado- Ya te dije que no vas a…
-Ya dejen de pelear como dos chicos- murmuró inmutable una voz a nuestras espaldas
Ambos nos volteamos sorprendidos. Evandar, seguido por Rosalinda, nos miraba con los brazos cruzados.
-Así que es cierto. Has regresado- musitó dirigiéndose a Jason
-Contén tu emoción Evandar; yo se que te alegras de verme- replicó él irónico- Rose- agregó luego, dirigiendo su mirada hacia Rosalinda y sonriendo descaradamente mientras le guiñaba un ojo- Mucho tiempo sin vernos. Te ves muy bien.
Esta le respondió con una mueca de irritación, mientras ponía los ojos en blanco.
-¿Dónde está Saphire?- pregunté, ignorando el comentario de Jason
-Si; así estaría toda la familia reunida- interrumpió él con más sarcasmo.
Rosalinda y yo lo fulminamos con la mirada, mientras Evandar suspiró cansinamente.
-Está cerrando el salón de las espadas- explicó, dirigiéndose enteramente hacia mí- estará aquí en unos minutos.
Dicho esto se abrió paso entre los dos y abrió la puerta de la habitación.
-Y Jason- dijo antes de abrirla completamente- tú vas a esperar afuera.
Dicho esto atravesó el marco junto con Rosalinda.
-Uh, ese vejestorio sabe todo lo que pasa en esta casa- dijo con cierto desagrado, una vez que Evandar hubo entrado- da escalofríos.
-Diviértete aquí afuera- repliqué con la misma sonrisa que él usaba tan a menudo.
-Oh, créeme que lo haré- me guiñó un ojo, cosa que solo ayudo a aumentar mi irritación. Abrí la puerta y entré, cerrándola de un portazo.

Unos minutos después
Literalmente corrí, por el intrincado pasillo, hasta que divisé la puerta que comunicaba con la habitación de Angy.
Ladee la cabeza algo confundida; Jason estaba allí, recostado contra una de las paredes.
-Llegas tarde- me reprochó sin siquiera levantar la mirada - el resto de los interrogadores ya están adentro.
-¿Entonces qué haces aquí afuera?- me oí preguntar. En realidad ¿por qué me importaba?
-Aparentemente tu noviecito no me considera “de confianza”- se encogió de hombros, quitándole importancia
-Oh, ya veo- en realidad, era un alivio que él no participara de la conversación. No era solo Erik quien no lo consideraba confiable.
-Oh, entonces yo…-murmuré señalando el picaporte.
Él se hizo a un lado con una sonrisa y dejó que yo abriera la puerta.
-Cuida tus espaldas- me susurró antes de cerrar la puerta detrás de mí.
¿Qué? ¿Qué cuide mis espaldas? ¿Qué rayos había querido decir con eso?
Mis pensamientos seguían divagando aquella extraña-y perturbadora-oración, mientras las miradas de los presentes se voltearon hacia mí.
Pasaron unos segundos antes de que lo notara, por lo que mis mejillas se tiñeron de un rosáceo violento.
-Lamento la tardanza- me limité a musitar, mientras me sentaba en una silla, junto a Erik.
Mis ojos se posaron en Angy. Parecía una sospechosa que estaba a punto de ser interrogada por los policías. Un pájaro indefenso rodeado de gatos.
Sus ojos daban la impresión de haber aumentado de tamaño y su piel estaba tan pálida que parecía enfermiza.
Sentí una profunda empatía hacia ella. Despertar en un lugar que no conoces, rodeada de gente extraña, que no era humana; era sin lugar a dudas una experiencia escalofriante. Más si tenías en cuenta todo lo que probablemente había vivido anteriormente.
Esto me hizo recordar mi propia situación. Parecían haber pasado días desde que había descubierto la verdad sobre Erik y su familia. Sin embargo, apenas si habían transcurrido horas. Extrañamente, y a pesar de que conservaba el deseo de salir corriendo y no volver nunca más a esa casa, comenzaba a acostumbrarme lentamente a la situación.
Desvié la atención de ella un segundo y la centre en los demás que se habían acomodado a su costado.
Evandar y Rosalinda estaba allí. ¿Cómo habían llegado tan rápido?
Él permanecía tieso, recostado contra la pared con sus brazos cruzados, mientras ella descansaba en una butaca cercana. Ambos tenían, al igual que Erik, una expresión llena de preocupación y curiosidad.
Erik se volteó hacia mí y me hizo una seña con la cabeza.
Suspiré.
-Angy- comencé con un tono de voz mas tembloroso del que hubiera querido- hoy yo te pregunte qué era lo que te había ocurrido para causarte tanto temor, y bueno…-me detuve. Esto era mas difícil de lo que aparentaba- tú me dijiste que…
-Que te contaría todo- interrumpió ella con firmeza- y lo haré. Pero pensé que solamente estaríamos…-miró a su alrededor, observando con desconfianza a Erik y su familia.
-Esto nos incumbe tanto como a ella- intervino Erik frío- es más, nuestro mayor interés es saber como llegaste hasta aquí cubierta por esa esencia tan…peculiar.
Angy lo miró fijamente y se mordió el labio inferior
-Se que te resultará difícil confiar en personas que no conoces- comenzó Evandar amablemente- en especial si sabes que no son humanos…
Abrí los ojos de par en par ¿cómo se había enterado de qué ella lo sabia?
Angy desvió su mirada de Erik y la centró en Evandar, frunciendo levemente el seño.
-¿Qué son?- murmuró finalmente- no son humanos…y para ser sincera no creo en los vampiros así que…
Rosalinda soltó una risita
-Oh, no. No somos vampiros- dijo ella entre risitas- me alegra que alguien lo entienda.
-¿Entonces…qué son?- insistió ella
-te lo diremos a su tiempo- respondió Evandar calmadamente- pero ahora, es esencial que nos digas todo lo que viste, todo lo que escuchaste; todo lo que te pasó.
Angy volvió a morderse el labio y se llevó una mano a las sienes.
Inhaló y exhaló varias veces, y luego arrancó.
-Las personas que me secuestraron…aquella noche en el club- comenzó ella con voz pausada
Una idea llegó a mi cerebro
-¡Espera!- interrumpí de pronto, lo que hizo que todos se voltearan hacia mí.- ¡Tú eres esa chica que desapareció en el club al que fui! ¿Recuerdas Erik?
Él asintió lentamente.
-Sí. Así es.- contestó Angy- Esa noche…lo único que recuerdo es que una espesa niebla se había formado…cerca del bosque.
Erik abrió los ojos de par en par y murmuró algo que yo no comprendí.
-Una niebla- musitó Evandar pensativo- ¿algo más?
-Pues, no mucho. supongo que después de eso perdí el conocimiento. Y luego desperté en una habitación oscura y húmeda.- prosiguió Angy despacio, como si las imágenes flotaran aun en su cabeza- luego…
La puerta se abrió de golpe.
-¿Se puede saber por qué rayos está Jason esperando en la puerta? ¿Desde cuando él es bienvenido en esta casa?- espetó una voz furiosa.
Era Saphire, cuyos ojos se habían oscurecido debido a la irritación, hasta tomar un negro profundo.
Al ver esto, Angy se sobresaltó y pegó un pequeño grito mientras comenzaba a temblar en la cama.
Todos volteamos nuestras cabezas hacia ella.
-Tranquila, esta bien. Ella no te hará nada- trató de calmarla Evandar
Angy dejó de temblar.
-¿Quién es ella?- preguntó Saphire frunciendo el seño y ladeando la cabeza, mientras se acomodaba contra una de las paredes
-Oh, ella es Angy- respondí yo tímidamente- la encontramos desmayada en el bosque y…
-Genial, lo que necesitábamos. Más humanos- murmuró Saphire fríamente.
Rosalinda le dirigió una mirada mordaz.
-Sus ojos…eran como los de…-susurró Angy, aun consternada por el susto
-¿Cómo los de?- inquirió Erik impaciente, su voz  llena de curiosidad
-Esos ojos. Ambos los tenían. La chica y el chico- murmuró ella en respuesta.
La familia Borleck se miró entre sí, intercambiando miradas llenas de significados ocultos.
-¿dijiste que eran dos? ¿Un chico y una chica?- preguntó Rosalinda dulcemente- ¿podrías describirlos cielo?
Angy dudó un instante
-No los ví prácticamente. Solo cuando la neblina se formó- un escalofrió la recorrió al recordar esto- la chica tenia el cabello largo y negro. Y sus ojos… eran como los de ella- señaló a Saphire con cierto temor-Nunca había visto ojos así en una persona. Parecían…parecían los ojos de un cuervo.
Ante este comentario todos largamos una exclamación. ¿Ojos de cuervo? ¿Cabello negro? ¿Seria posible…?
-Esos malditos…-murmuró Saphire apretando los dientes- ¿qué están planeando?
-Estuvieron aquí anoche…si tan solo yo hubiera sido mas fuerte- Erik estrelló su puño contra una de las paredes, lo que hizo que esta se abollara
¿Estuvieron aquí?- exclamó Rosalinda atónita- ¿Qué ocurrió?
-Ellos…ellos trataron de llevarse a Amethyst- murmuró él con resentimiento- si tan solo yo…
-Hey, no es tu culpa- me apresuré a decirle, mientras envolvía su mano con las mías. Estaba fría.
-Chico eso no fue tu culpa. No había nada que pudieras hacer- lo tranquilizó Evandar- solo me alegro de que la chica este bien.
Le sonreí, aun sujetando la mano de Erik.
-¿Pero, qué es lo que quieren entonces? ¿Por qué trataron de llevarme, y por qué secuestraron a Angy?- musité frunciendo el seño
-Y a las otras chicas- agregó Erik
-¿Qué?- murmuré sin entender
-Las desapariciones de otras chicas que han estado ocurriendo  no son casualidad. Desde el principio supuse que era ellos pero no estaba seguro…ahora lo estoy- Erik dijo, apretando mi mano suavemente.
¿Pero por qué?- dudó Rosalinda
Se produjo un silencio
De pronto, como si se hubiera percatado de algo crucial, Evandar abrió los ojos de par en par, revelando así una expresión de perplejidad.
Sin embargo, no pronuncio palabra, simplemente se limitó a cerrar los puños ligeramente y dirigirle una mirada aprehensiva a sus hijos adoptivos.
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Rápido comentario; es posible que el siguiente capitulo tarde un tiempo también, debido a que la semana que viene comienzo las clases de nuevo ¬¬

en fin, espero sepan entender eso.
se los quiere mucho :)

cuidense^^